AFORISMOS DE BUDA PARA MEDITAR …
No vivan en el pasado, no sueñen con el futuro, concentren la mente en el momento presente.
Se pueden encender miles de velas con una sola vela y la vida útil de esta no se acortará. La felicidad nunca disminuye al compartirla.
Estamos moldeados por nuestros pensamientos; nos convertimos en lo que pensamos. Cuando la mente es pura, la alegría sigue como una sombra que nunca se va.
La paz viene del interior. No la busquen afuera.
La mente es todo. En lo que piensas te conviertes.
Nadie nos salva sino nosotros mismos. Nadie puede hacerlo ni debe. Nosotros mismos debemos andar el camino.
Es mejor conquistarte a ti mismo que ganar mil batallas. Entonces la victoria es tuya. No te la pueden quitar, ni los ángeles ni los demonios, ni el cielo ni el infierno.
Para gozar de buena salud, para brindar verdadera felicidad a la familia, para traer paz a todos, primero se debe disciplinar y controlar la propia mente. Si un hombre puede controlar su mente, puede encontrar el camino a la Iluminación, y toda la sabiduría y la virtud vendrán a él naturalmente.
Solo hay dos errores que uno puede cometer en el camino hacia la verdad; no ir hasta el final, y no empezar.
En lo que pensamos, nos convertimos.
Somos lo que pensamos.Todo lo que somos surge con nuestros pensamientos. Con ellos construimos el mundo.
El que camina por el noble óctuple sendero (sadhana prescripta por Buda) con determinación inquebrantable está seguro de alcanzar el Nirvana.
Con los tontos no hay compañía. Antes que vivir con hombres egoístas, vanidosos, pendencieros y obstinados, que el hombre camine solo.
Por muchas palabras santas que leas, por muchas que hables, ¿de qué te servirán si no las pones en práctica?
No soy el primer Buda que vino a la Tierra, ni seré el último. A su debido tiempo, otro Buda surgirá en el mundo: un Santo, supremamente iluminado, dotado de sabiduría en la conducta, auspicioso, conocedor del universo, un líder incomparable de los hombres, un maestro de los ángeles y los mortales.
Ocúpense de su propia salvación. No dependan de los demás.
Ser ocioso es un sendero corto a la muerte y ser diligente es el camino de vida; los necios son ociosos, los sabios son diligentes.
Todas las malas acciones surgen debido a la mente. Si la mente se transforma, ¿pueden permanecer las malas conductas?
El que da tendrá verdadera ganancia. El que se somete será libre, dejará de ser esclavo de las pasiones. El hombre justo se deshace del mal, y al desarraigar la lujuria, el resentimiento y la ilusión alcanza el Nirvana.
Enseñad a todos esta triple verdad: un corazón generoso, una palabra amable y una vida de servicio y compasión son las cosas que renuevan a la humanidad.
Aquel que experimenta la unidad de la vida ve su propio Ser en todos los seres, y todos los seres en su propio Ser, y mira todo con un ojo imparcial.
Conquistarse a uno mismo es una tarea mayor que conquistar a los demás.