SEAN PUROS COMO UN LOTO …
Discurso Divino, 2/11/2017
El agua que cae del cielo (en forma de lluvia) va a los océanos. Cada gota de lluvia es muy pura y clara cuando cae del cielo. Pero en el momento en que entra en contacto con la tierra, se mezcla con todas las impurezas y se vuelve impura. Dependiendo del lugar donde caiga, cambia su identidad. Cuando cae al río Ganges, también obtiene la fama del agua del Ganges. Esa agua sagrada del Ganges se usa con el propósito de adorar a Dios. Esa misma agua se derrama sobre nuestras cabezas y tenemos la sensación de habernos purificado.
Pero cuando la misma agua cae en el drenaje, se vuelve contaminada, sucia e impura. Permitamonos rociar nuestras cabezas con ese tipo de agua que ni siquiera toquemos con nuestros pies. Cuando el agua cae del cielo es muy pura pero tan pronto entra en contacto con la tierra, dependiendo del lugar donde cae, cambia su identidad en consecuencia.
Cuando los niños nacen, sea un niño o una niña, serán puros de corazón. No tendrán deseos o aspiraciones mundanas. No habrá Kama Krodha Loba Moha Mada y Matsarya (lujuria, ira, codicia, apego, arrogancia y envidia)
o egoísmo de ningún tipo, vanidad o apegos en ellos cuando son muy pequeños. Pero a medida que crecen, por el contacto de la sociedad, desarrollan todo tipo de malos sentimientos, orgullo y falsos apegos.
No es solo responsabilidad de los padres de los niños protegerlos para que permanezcan puros, sino también responsabilidad de toda la sociedad. Con cualquier parte de la sociedad, con la que ellos se relacionen, esa clase de atributos desarrollan en sí mismos.
El niño puede crecer como agua del Ganges o agua de drenaje según la compañia.
Extracto del Discurso Divino – 11 de febrero de 2017
Fuente: Sri Sathya Sai Vrinda