SAI – EL PROTECTOR SILENCIOSO
Sucedió en el año 1990. Swami estaba en Kodaikanal, pasando tiempo con Sus hijos a quienes había seleccionado para acompañarlo durante aproximadamente un mes. Un día, Swami llamó a su conductor y le ordenó que preparara su coche para dar una vuelta por Kodai.
El conductor estaba desconcertado, ya que no era típico que Bhagavan fuera a ninguna parte de Kodai sin Sus estudiantes, particularmente a una hora tan extraña del día. Sin embargo, preparó el automóvil y lo colocó frente a Sai Shruthi (la residencia divina). Swami entró en el auto y comenzó a dirigir al conductor hacia cierto lugar. Cuando llegaron a una zona pantanosa y selvática hizo que el conductor detuviera el coche. Se bajó y comenzó a caminar a través de esta espesa jungla que estaba muy resbaladiza. El conductor, movido por el amor y la preocupación de que los tiernos Pies de Loto del Señor pudieran ceder en el suelo resbaloso y que Swami se lastimara, caminaba cautelosamente delante de Él, asegurándose de que no hubiera espinas y de que el suelo no fuera peligroso.
Pero Swami caminaba como si tuviera una misión … Se lanzó a través de una zona boscosa densa y finalmente arribó a un enorme acantilado. Al llegar alli se detuvo y se limitó a mirar fijamente al horizonte frente a Él y una pequeña aldea que estaba al pie del acantilado. Se quedó entonces durante unos minutos de manera muy casual, casi como si disfrutara del hermoso paisaje de Kodai.
Después de un tiempo, Swami se dio la vuelta, caminó de regreso al auto junto con el conductor y regresó a Sai Shruthi. Ahora este conductor estaba completamente confundido, ya que todo el asunto había parecido tan aleatorio e incluso inútil. Se preguntaba cuál podría ser el significado de Swami conduciendo todo el camino solo para mirar un acantilado. Más tarde ese día, hubo lluvias torrenciales que duraron bastante tiempo.
Al día siguiente, este devoto estaba sentado a los Pies de Loto de Swami, disfrutando de Su sannidhi (Presencia divina). Al ver que Swami estaba de buen humor, se aventuró a preguntar: «Swami, ¿cuál fue el significado detrás de que fueras a ese acantilado ayer?» Swami respondió muy enfáticamente: «Sabía que iba a llover ayer, como resultado de lo cual la tierra suelta en la parte superior del acantilado habría creado un gran deslizamiento que arrasaría con todo el pueblo que estaba debajo. Así que me paré en ese suelo, haciéndolo más sólido para evitar el deslizamiento de tierra».
Tal es el poder de los Pies de Loto del Señor. «Brahma Kadigina Paadamu … Brahmamu Tanenee Paadamu … » Esos Pies de Loto son adorados por el mismo Señor Brahma y, de hecho, son verdaderamente el mismo Brahman. Son estos mismos Pies de Loto que transformaron una roca en Devi Ahalya con solo un simple toque … es desde estos Pies de Loto de donde emergen todos los ríos sagrados … los Pies que son el refugio para todos y cada uno de nosotros. ¡Cuán silenciosa y amorosamente nos protege Swami sin pedir siquiera un agradecimiento a cambio! Todo lo que podemos hacer es cantar la gloria de esos Pies de Loto con gratitud y gozo, y orar para que permanezcamos siempre allí, sirviéndole hasta nuestro último aliento.
¡Gloria al Avatar Bhagavan Sri Sathya Sai Baba!
Jai Sairam
Fuente: Satsang de un devoto compartiendo la experiencia divina.