EL SIGNIFICADO DEL SLOKA …
por Sri Sathya Sai Baba
Un Pundit erudito estaba una vez dando discursos sobre el Gita en la augusta presencia de un maharaja. Un día llegó el turno de este sloka:
Ananyaaschinthayantho maam
Ye janaah paryupaasathe
Theshaam nithyaabhiyukthaanaam
Yogakshemam vahamyaham.
El Pundit estaba explicando con entusiasmo las múltiples implicaciones del sloka (versiculo del Gita), pero el Maharaja negó con la cabeza y dijo: «Este significado no es correcto». Continuó discutiendo la veracidad de cada una de las explicaciones que dio el pundit. El pobre pundit había ganado distinciones meritorias en la corte de muchos Maharajas y todos ellos lo honraron con títulos pomposos. Se sintió como si lo hubieran apuñalado cuando el maharaja, en presencia de todo el grupo de cortesanos, condenó su explicación de este sloka como un «error». Le dolía el insulto; pero, armando coraje, se dedicó de nuevo a su tarea, y reuniendo toda su erudición, se sumergió en un discurso elocuente sobre el significado múltiple de las palabras «Yoga» y «Kshema». El Maharaja no aprobó ni siquiera esto; ordenó: «Descubre el significado de este sloka y, habiéndolo entendido bien, vuelve a verme mañana». Con esto, el Maharaja se levantó de su trono y entró en los aposentos interiores.
El Pundit perdió incluso los pocos gramos de coraje que le quedaban. Estaba abrumado por la ansiedad; se tambaleó bajo el insulto; llegó a casa y, dejando la copia del Gita a un lado, se dejó caer en su cama.
Sorprendida por esto, la esposa del Pundit preguntó: «¿Dime, por qué volviste a casa desde el palacio hoy con tanto pesar? ¿Qué sucedió exactamente?» Llovió una pregunta ansiosa tras otra, por lo que el Pundit se vio obligado a describirle todo lo que había sucedido, los insultos que se acumulaban en su cabeza, la orden con la que el Maharaja lo envió a casa, etc. La esposa escuchó tranquilamente el relato de lo que había sucedido y después de reflexionar profundamente sobre el incidente, dijo: «Sí, es cierto. Lo que dijo el Maharaja es correcto. La explicación que diste para el sloka no es la correcta. ¿Cómo podia aprobarla el Maharaja?» Ante esto, el pundit se levantó enojado del catre, como una cobra cuya cola es pisoteada con fuerza. «¿Qué sabes, mujer tonta? ¿Soy inferior en inteligencia a ti? ¿Tú, que estás en la cocina todo el tiempo, cocinando y sirviendo, pretendes saber más que yo? Cierra la boca y abandona mi presencia», rugió.
Pero la dama se mantuvo firme. Ella respondió: «¡Señor! ¿Por qué te enfureces tanto ante una declaración de pura verdad? Repítete el sloka una vez más y reflexiona sobre su significado. Entonces llegarás a la respuesta correcta». Así, con sus suaves palabras, la esposa trajo calma a la mente de su esposo.
El Pundit empezó a analizar el significado de cada palabra individual en el sloka. Ananyaaschinthayantho maam; comenzó, deliberada y lentamente, repitiendo en voz alta los diversos significados. La esposa intervino y dijo: «¿De qué sirve aprender y exponer el significado de las palabras? Dime cuál era tu intención cuando te acercaste a este Maharaja. ¿Cuál fue el propósito?» Ante esto, el pundit se volvió loco. «¿No debería dirigir esta familia, esta casa? ¿Cómo voy a hacer frente al costo de la comida y la bebida, de la ropa y las cosas, para ti y todos los demás? Es por esto que fui a él, por supuesto; o si no, ¿qué asunto tengo yo con él?», gritó.
Entonces la esposa respondió. «¡Si tan solo hubieras entendido lo que el señor Krishna ha declarado en este sloka, el impulso de ir a este Maharaja no habría surgido! Si Él es adorado sin ningún otro pensamiento, si uno se entrega a Él, si en todo momento la mente está fija en Él, entonces el Señor ha declarado en este sloka que Él proporcionaría todo para el devoto. No has hecho estos tres; ¡te acercaste al Maharaja, creyendo que él te proveeria todo! Ahí es donde has ido en contra del significado del versículo. Esa es la razón por la que no aceptó tu explicación».
Al escuchar esto, ese reputado erudito se sentó un rato, rumiando sus comentarios. Se dio cuenta de su error. No se dirigió al palacio al día siguiente. En cambio, se sumergió en la adoración de Krishna en su casa. Cuando el rey preguntó por qué no había aparecido el pundit, los cortesanos dijeron que se estaba quedando en casa y no había partido. El rey envió un mensajero, pero el pundit se negó a ir al palacio. Él dijo: «No hay necesidad de que vaya a ver a nadie; mi Krishna me proporcionará todo; Él mismo llevará mi Yogakshema. Sufrí insultos porque no me di cuenta de esto durante tanto tiempo, siendo cegado por el ansia de conocer los múltiples significados de meras palabras. Rindiéndome a Él, si estoy incesantemente ocupado en adorarlo, Él mismo me dará todo lo que necesito».
Cuando el mensajero llevó este mensaje al palacio, el Maharaja procedió a la morada del Pundit a pie; cayó a los pies del Pundit, diciendo: «Te agradezco sinceramente por explicarme este día, por tu propia experiencia, el significado del sloka que expusiste ayer». Por lo tanto, el rey le enseñó al pundit que cualquier propagación de asuntos espirituales que no surja del crisol de la experiencia es un mero brillo y espectáculo.
Fuente: De Chinna Katha, historias y parábolas de Bhagavan.