LA CONCENTRACIÓN DE LA MENTE EN LO DIVINO ES LA VERDADERA PRÁCTICA ESPIRITUAL
por Sri Sathya Sai Baba
Shivaratri, 19/2/2004
Nachiketa, hijo de Vajasravas, le oró al Señor Yama (dios de la Muerte) pidiéndole que le enseñara el conocimiento del Atma. Entonces Yama le dijo, “¡Oh! ¡Hijo de la Inmortalidad! Primero establece un lazo con la fuente de la cual tú has venido al mundo”. También le aconsejó a Nachiketa que puesto que el cuerpo era perecedero como una burbuja de agua y la mente era fugaz, ambos debían ser desechados, lo que significa que no debe dárseles importancia y que deben hacerse esfuerzos por realizar la verdad fundamental.
“¡Nachiketa! No necesitas buscar al Señor Ishwara pues Él está muy presente dentro de ti”, dijo el Señor Yama.
¡Amados Estudiantes y Devotos!
Deben comprender la verdadera y fundamental significación y filosofía del Festival de Shivaratri. Primero dense cuenta de que no son el cuerpo físico que es perecedero e impermanente. Han de mirar al mundo objetivo con el ojo de la sabiduría (jñana chakshu) y no con el ojo físico (charma chakshu). Los animales, insectos, pájaros y bestias están viendo este mundo con sus ojos físicos. Si miran este mundo objetivo con los meros ojos físicos, ¿qué diferencia habrá entre ustedes y esas criaturas? Simplemente permanecerán como tales. No serán capaces de realizar su verdadera naturaleza, que está más allá del mundo físico. Deben comprender la realidad trascendental, más allá del cuerpo y de la mente. Esto es posible sólo con la ayuda del ojo de la sabiduría (jñana chakshu). El cuerpo es como una burbuja de agua. Desaparecerá un día u otro. Ustedes no son el cuerpo con nacimiento, crecimiento, declinación y, finalmente, muerte. Por lo tanto, Yama exhortó a Nachiketa a que realizara el Atma Tattva, el principio del Atma, que no tiene nacimiento ni muerte.
Entonces, surge la pregunta de ¿qué es el Atma?
El Atma (Espiritu) no tiene forma. Es infinito, indescriptible e inconmensurable.
El Atma es sin atributos (nirgunam), puro (niranjanam), la morada final (sanatana niketanam), eterno (nityam), inmaculado (shuddha), iluminado (buddha), liberado (mukta) y la personificación de lo sagrado (nirmala svarupinam).
Ese principio del Atma o Atma Tattva es inmanente en cada individuo, no, en cada ser, en la forma de Conciencia. Su vida como ser humano adquirirá significado y propósito sólo cuando realicen esa Conciencia. Las indagaciones acerca de asuntos mundanos carecen de sentido y son ejercicios triviales. El Señor Yama exhortó a Nachiketa a que tomara conciencia de este principio el cual una vez realizado, haría que conociera todo lo demás. El cuerpo tiene nacimiento, crecimiento, declinación y muerte. Pero el Atma no tiene tales características. Es el eterno testigo de todo en este Universo. En consecuencia, ustedes deben realizar ese principio del Atma. Eso fue lo que Yama le enseñó a Nachiketa.
El Atma es eterno sin nacimiento ni muerte.
No tiene comienzo, mitad ni fin.
Es omnipresente y el eterno testigo. (Poema en telugú)
El Señor Yama le dijo a Nachiketa, “Este cuerpo humano que es como una burbuja de agua va a explotar un día u otro. Por ello, toma conciencia del Atma Tattva, no con tus ojos físicos sino con el ojo de la sabiduría”. Entonces surge la pregunta acerca de qué es la sabiduría (jñana). ¿Es conocimiento físico o conocimiento secular o conocimiento relacionado con los objetos de la naturaleza? No, no es ninguno de éstos. El experimentar el principio de la no-dualidad es la verdadera sabiduría (Advaita darshanam jñanam). El Atma trasciende nombres y formas. Asi, Yama exhortó a Nachiketa a que alcanzara el conocimiento supremo o Atma jñana.
Hoy en día las gentes van como locas en busca de conocimiento espiritual. Adoptan diversas prácticas y posturas corporales y llaman a esto sadhana espiritual. Pero ninguna de éstas pueden ayudar a alcanzar el Atma jñana. Lo que es importante es el Amor (Prema) que es la corriente que subyace a todas las formas de sadhana. Al darse cuenta de la naturaleza perecedera de este cuerpo (deha), deben tomar conciencia del morador interno (dehi) que no es otro que el Atma.
El cuerpo se compone de cinco elementos y está destinado a perecer tarde o temprano, pero el Morador interno no tiene nacimiento ni muerte. No tiene ningún apego y es el eterno testigo. En verdad, el Morador interno en la forma del Atma es realmente Dios mismo. (Poema en telugú)
El verdadero y eterno Atma Tattva es inmanente en nuestro propio cuerpo. Deben gradualmente abandonar el apego al cuerpo (dehabhimana) y cultivar el amor hacia el Atma (Atmabhimana). Piensan que son el cuerpo y desarrollan apego a él. Mientras dura el proceso de inhalación y exhalación en el cuerpo, lo consideran como suyo. Una vez que se detiene, no saben lo que está sucediendo a su alrededor.
¡Encarnaciones del Atma!
El Atma es Divino. Nunca olviden este aspecto. Algunas personas encuentran felicidad en el sadhana físico, pero el placer que derivan de ello es sólo físico y de naturaleza temporaria.Todo lo que está asociado con el tiempo está destinado a desaparecer un día u otro. Deben apegarse a lo que es permanente, eterno y real. El amor de Dios está más allá de toda descripción. Es supremo. Por otra parte, el amor físico es momentáneo y está asociado con la relación física. Lo que está asociado al cuerpo viene y se va, pero el amor puro y altruista que emerge del corazón viene y crece. Deben cultivar tal amor. Nunca disminuirá …
Dios no tiene nacimiento ni muerte. Él no tiene comienzo ni fin. Él está presente en todos los seres como el eterno testigo. (Poema en Telugú)
El amor de Dios es la única Verdad. Nunca cambiará. Adoren esa Verdad inmutable. Busquen refugio en esa Verdad. Ese es el único sadhana real para alcanzar la liberación. ¿Qué se quiere decir por liberación o moksha? ¿Es vivir en alguna edificación palaciega con habitaciones con aire acondicionado ubicada en el cielo arriba? No. No. en absoluto. El librarse del apego (moha) es la verdadera liberación. Deben abandonar el apego al cuerpo en primer lugar. Una vez que se libren del apego al cuerpo, naturalmente desarrollarán el renunciamiento (vairagya), que al final los llevará a la liberación. El amor es el único camino que puede llevarlos a la liberación.
No hay duda de que la educación mundana es también importante para ganarse un medio de vida, pero no puede impartir verdadera sabiduría. Sólo el conocimiento del Ser o Atma Vidya puede otorgarles felicidad eterna. Sin embargo, la educación secular es también valiosa para cuidar de sus necesidades físicas. No deben abandonarla totalmente. La educación mundana es el negativo y la educación espiritual el positivo. Ambas son esenciales para la felicidad aquí y más allá.
¡Estudiantes! Deben volverse maestros en ambas formas de conocimiento, secular y espiritual. Pero siempre recuerden que sólo el conocimiento átmico es el verdadero conocimiento. Una vez que lo adquieren, habrán adquirido todo lo demás.
Fuente: Extracto del Discurso Divino en ocasión de Mahashivaratri, 19/2/2004