Testimonio de VijaySai, B.S., M.A.

TESTIMONIO DE VIJAYSAI, B.S., M.A.

VijaySai es un exalumno del Instituto de Enseñanza Superior Sri Sathya Sai, de Prasanthi Nilayam. Los títulos que obtuvo allí equivalen a Licenciatura en ciencias (Física) y Maestría en idioma y literatura ingleses. Reside actualmente en Bangalore, India.

Descargar el archivo: Testimonio de VijaySai

VijaySai

Sai Ram, hermano. Normalmente no comento estos temas en FB porque la percepción, las creencias y experiencias acerca de las mismas situaciones pueden ser diametralmente opuestas, y no tengo derecho a juzgar o comentar acerca de las creencias y experiencias de los demás. Sin embargo, como tú me has etiquetado repetidamente para que responda, he aquí mis opiniones detalladas.

Sí, cuando Swami estaba en Su cuerpo físico, Él no avalaba a ningún médium. Sin embargo, esto también estaba sujeto al contexto, y era motivado por diversos sucesos en la época de los discursos. Sin embargo, Swami nunca objetó a Lucas Ralli, Phyllis Krystal ni a muchos otros psíquicos que transmitían mensajes de Él e incluso los publicaban. No he oído que Swami haya mencionado que no usaría otro instrumento después de haber abandonado Su cuerpo físico. Yo, y todos los demás que hemos estado con Swami, Lo hemos oído decir «Amen mi incertidumbre». Nadie puede decir que Sathya Sai Baba no hará nunca tal o cual cosa. Si algo sé con certeza, es que nuestro Señor puede hacer cualquier cosa, incluso cosas impredecibles. Lo que comprendo del fenómeno es que Madhusudan ha obtenido automáticamente los poderes de clarividencia, clariaudiencia y clarisensibilidad (ver el más allá, oír el más allá y sentir el más allá), y que es capaz de comunicarse con la Sukshma Shareera, el cuerpo sutil de Swami.

En este tema de Swami en forma sutil hay dos lados, muy fuertemente diferenciados. Por un lado, tú y muchos otros están convencidos de que no se trata de Sathya Sai Baba dando instrucciones a Madhu, y de que allí hay engaño. Por el otro, hay muchos que están convencidos de que quien está allí, en la forma sutil, no es otro que nuestro amado Swami. Yo atestiguaré mi experiencia, mi creencia y mis puntos de vista. No puedo responder acerca de las experiencias de otras personas. Sólo puedo certificar lo que nos ha ocurrido a mí y a mi familia, aunque mencionaré algunas otras experiencias.

¿Cómo es que conozco a Madhusudhan? Él fue mi estudiante en Brindavan. Le he enseñado inglés durante su curso de pregrado. El banco HDFC donde él trabajaba está a un kilómetro de mi casa. ¿Cómo comprendíamos la divinidad de Swami, en Su forma física? Era a través de Su omnipresencia, omnipotencia y omnisciencia. Él curaba a las personas y resucitaba a personas muertas. Su amor era avasallador, transformador y conmovedor. En la forma sutil también he visto todo esto. Estoy convencido, más allá de toda duda, de que se trata de nuestro querido Swami, que está aquí sin Su cuerpo físico. Así como Swami en, los primeros tiempos, demostraba a los devotos de Shirdi que era el mismo Sai de Shirdi, Swami en la forma sutil me ha probado que es indudablemente mi dulce Señor Sathya Sai, con todos los atributos de antes, excepto Su cuerpo físico. Tengo múltiples ejemplos, de los cuales narraré unos pocos.

Muddenahalli se hizo famosa después de la primera visita de Swami a Kodaikanal, en la forma sutil, en mayo de 2014. Swami Se me reveló en dicha forma el 18 de septiembre de 2011, cuando tuvimos la sesión de Samarpan en Brindavan. Al principio yo no lo podía creer. Mi primera entrevista duró unos 45 minutos, durante los cuales pregunté acerca de muchas dudas, y Le pedí que me probara que Él era de verdad el mismo Sai, y no algún otro espíritu. Obtuve mi confirmación y reconfirmación. Él me reveló situaciones que habían ocurrido cuando yo estaba en Su dormitorio en Brindavan, en 1994; incidentes que sólo conocíamos Swami y yo. Madhu también me dijo que Swami le dijo que cuando yo era un bebé y tenía fiebre muy alta, Él había creado vibhuti y me lo había colocado sobre la cabeza, después de lo cual mi fiebre había descendido. Pensé que esto era ciento por ciento falso, pues no conocía ningún incidente así en mi vida. Cuando volví y se lo pregunté a mi madre, ella dijo que eso había ocurrido en Dharwad, en casa del profesor Adke, en 1971, cuando yo tuve mucha fiebre durante la visita de Swami a Hubli-Dharwad, los pueblos gemelos de Karnataka del Norte. Yo quedé estupefacto. Swami, en Su forma sutil, le dijo a mi padre los detalles de cómo él (mi padre) había abierto el Centro Sathya Sai y sala de bhajans, allá por 1966, en Hubli, y cómo sólo dos o tres de ellos acostumbraban a hacer Nagarasankirtan a la mañana temprano.

Ahora explicaré algunas ocasiones en que Él reveló Su omnipresencia en Su forma sutil. Fue el 22 de septiembre de 2011, un jueves, cuatro días después de que yo hubiera sido presentado por primera vez ante la forma sutil. Todavía no podía creer en ella ni aceptarla por completo. Me sentía aturdido. Estaba sentado en mi casa, en Bangalore, cantando mientras tocaba el armonio. Mi familia, es decir mis padres, mi esposa y mis hijos, habían ido a un acto. Ese día yo estaba de ánimo devocional, y lloraba mientras cantaba todas las canciones que había cantado en la presencia física de Bhagavan, incluyendo «Tu Pyar Ka Sagar» y «Hum Ko Tumse Pyar Kitna». Repentinamente recordé que el lunes siguiente tenía una presentación ante un cliente corporativo. Pensé: «Si sigo cantando, ¿qué pasará con esa importante presentación?». Cerré el armonio, y estaba en el proceso de abrir mi computadora, cuando sonó el teléfono. Miré la pantalla y me di cuenta de que era Madhu quien me llamaba. Acepté la llamada. Él dijo: «Señor, estoy en Raipur; Swami Se me acaba de aparecer, y dijo «Dale este mensaje a VijayaSai». Me pidió que lo escribiera, y lo hice mientras Él me dictaba. ¿Puede Ud. tomar nota, Señor?». Dije «Sí», y comencé a escribir en mi computadora. El mensaje era: «¿Por qué dejaste de cantar? Yo te estaba escuchando. ¿Por qué te preocupas acerca de tus negocios? ¿Por qué temer si estoy allí contigo? Yo me ocuparé. Sigue cantando, te escucho». Madhu estaba a más de 1.300 kilómetros de distancia, en otra ciudad.

Este es otro ejemplo de omnipresencia. Yo estaba en mi sala de reuniones hablando acerca del poder de la mente, y la ley de atracción, a un grupo de personas. Les mencioné que la mente es todopoderosa, y mediante ella uno puede usar la ley de atracción para atraer personas, circunstancias y eventos que pueden ciertamente ayudarnos a obtener más dinero, mejores carreras, mejores relaciones, mejor salud y mejores cosas en todos los órdenes de la vida, porque la mente es todopoderosa y nosotros somos como imanes. Comencé a darles ejemplos prácticos de la ley de atracción, en diversas situaciones que habían ocurrido a numerosas personas, y entonces sonó mi teléfono. Era Madhu quien me llamaba.

Me disculpé, salí del cuarto y acepté la llamada. Madhu dijo: «Señor, Swami me ha pedido que le transmita un mensaje. Él dijo: «VijayaSai les está diciendo a algunas personas que la mente es todopoderosa, y que mediante la mente las personas pueden lograr éxito en cuanto al dinero, la salud, la carrera y muchas cosas materiales. A pesar de ser un estudiante Sai, VijayaSai ha olvidado lo más importante. Pídele que le diga al grupo que mediante esa misma mente también pueden darse cuenta de que ellos mismos son divinos»».

El 26 de noviembre de 2011 yo estaba en Leicester, Reino Unido, para hablar en el Congreso Nacional Sai. El hermano Veeru había organizado ese viaje. Mi esposa y yo fuimos alojados en un hotel durante la noche previa a mi charla. Miramos las persianas y cortinas, que eran hermosas, y también el tipo de televisor que había. Mi esposa y yo comentamos que las cortinas eran hermosas, y perfecta la combinación de colores. También hablamos del televisor, que nos gustó mucho. Luego olvidamos por completo esta conversación. Al día siguiente pronuncié mi charla en Leicester. Después de 10 u 11 charlas en Londres, Escocia y otros lugares, yo tenía una charla programada en el Centro Sai de Ginebra, en Suiza. Después de que pronunciara allí mi charla, se me aproximó una anciana y me dijo que Baba acostumbraba aparecer frente a ella cada pocos días, y que la había guiado regularmente. En realidad, no creí en su historia. Me pareció que era producto de su senilidad, y que probablemente alucinaba. Pensé que ella era mentalmente inestable («picchi», en telugu).

Cuando regresé, el 10 de diciembre, Swami nos pidió que nos reuniéramos con Él. Mi esposa y yo fuimos a casa de Madhu, en una localidad de Bangalore llamada Koramangala. La conversación fue la siguiente. «¿Cómo fue el viaje?». Dije: «Swami, con Tu gracia, todo fue maravilloso. Estoy asombrado de que en Leicester se hayan podido congregar 2.000 personas para Tu cumpleaños, cuando muchas veces no podemos lograr eso en Brindavan». Swami dijo: «Todos ellos son como abejas atraídas por la flor de loto. Ustedes no tienen que convertirse en ranas junto al loto, que no se dan cuenta de su valor». Continuó así: «Muchos de ellos ni siquiera han venido a Prasanthi Nilayam, y sin embargo son Mis devotos en el R.U.» Dije: «Swami, ellos se han entregado a Ti por completo». Swami preguntó: «¿Qué es la entrega?». Yo dije: «Ofrecerte todo a Ti, Swami». Swami dijo: «Todo Me pertenece. ¿Qué puedes ofrecerme que no sea Mío? Vivir la vida comprendiendo que nada es tuyo, y todo le pertenece a Swami: eso es la entrega». Continuó así: «En el R.U., en el hotel, las cortinas eran buenas, el televisor era bueno; a ustedes dos les gustaron, pero ¿las trajeron consigo cuando regresaron a casa? De la misma manera, recuerden que no se llevarán nada cuando abandonen la presente estadía temporal en la Tierra, así como no se llevaron nada cuando registraron su partida del hotel. Está muy bien que disfruten de lo que hay en el hotel, recordando todo el tiempo que no pueden llevarse las cosas cuando se retiran para volver a casa». Repentinamente dijo con severidad, en Telugu: «En Suiza, cuando esa anciana dijo que Yo aparezco ante ella, pensaste que ella estaba loca («picchi»). ¿Tú qué sabes? Lo que ella dijo es verdad. Yo voy a ella, y me comunico con ella todas las semanas». Él reveló nuevamente Su omnipresencia y omnisciencia.

Swami, en esta forma, resucitó a mi madre, que estaba muerta. Mi anciana madre estaba muerta, y el cuerpo se había enfriado. Mi padre estaba solo con ella, y yo estaba en otra ciudad, a dos horas de viaje. Cuando le envié un mensaje a Madhu para que informara a Swami, él me dijo que Swami había respondido negativamente, y había dicho que todo había terminado. Swami dijo (a través de Madhu) a alguien que estaba con Él en Muddenahalli: «La madre de VijayaSai acaba de morir». Incluso le dijo a Narasimhamurthy que mi madre había fallecido. Aproximadamente a la misma hora, mi padre, que estaba junto a mi madre, me confirmó que todo había terminado, y que el cuerpo estaba completamente frío. Entonces Swami dijo a las personas que estaban en Su presencia: «Paapam, iré allá ahora mismo, a ver a la madre de VijayaSai». Entonces desapareció de la presencia de Madhu. Madhu me envió un mensaje acerca de esto. Exactamente un minuto más tarde, mi madre abrió los ojos. En un discurso, unos días más tarde, Swami habló acerca del incidente de Draupadi, de cómo ella había rasgado un trozo de su sari para usarlo como venda para el dedo cortado de Krishna, y cómo ese mismo trozo se hizo akshaya, se multiplicó infinitamente en la forma de su sari, a medida que trataban de desvestirla. Él mencionó que la cuenta de VijayaSai estaba saldada. Él sabía que llegaría esta situación, y me había hecho hacer algo por Él, para poder devolverme el favor resucitando a mi madre. Más adelante habló con mi madre, y le dijo que la había resucitado porque quería que ella viera la gloria venidera de Su avatar.

Hace pocos meses me relataron otro incidente. Como no lo he oído directamente de los protagonistas, puede haber algunas imprecisiones menores en los detalles. Narraré mi versión del incidente. El Dr. Ram Shetty tuvo un severo ataque al corazón, y falleció en los EE.UU. Su esposa llamó desesperadamente a Narasimhamurthy, y le solicitó que informara a Swami. Habían pasado más de tres horas. Madhu, aquí, mencionó que vio juntos al Dr. Rama Shetty y a Swami. Cuando Narasimhamurthy le contó a Swami acerca de la llamada telefónica, Él le pidió a Narasimhamurthy que llamara a la esposa del Dr. Shetty, y le preguntara qué deseaba. Ella dijo que quería que su marido viviera. Swami le pidió al cuerpo sutil del Dr. Ram Shetty, que estaba con Él, que regresara. Y allá en EE.UU., el Dr. Ram Shetty se sentó en la cama, con vida.

Otra persona aseguró que Él le reveló Su omnipresencia a través de Madhusudan. Dijo que esto ocurrió dos veces: la primera, estando él en su casa, y la segunda estando en la oficina. Recibió una llamada de Madhusudan, quien le dijo que eso estaba ocurriendo en ese preciso momento, y que él debía elegir una opción en particular, y decir algo en especial a alguien; todo lo cual resultó ciento por ciento apropiado. Esta persona dijo después que si hubiera elegido la otra opción, ahora estaría en problemas.

Otra persona aseveró que dudaba de que se tratara realmente de Swami, y se preguntaba si Madhusudan se limitaba a leer su mente. Quiso saber si Madhusudan sería capaz de revelar pequeños detalles acerca de algo que aún no había ocurrido. Esta persona relata que inmediatamente Madhusudan le dijo: «Swami me dice que comprende tu duda. Él dice que la persona «A» llegará aquí en pocos minutos, y te dirá exactamente «estas palabras». El incrédulo pensó que se trataba de una proposición extravagante, porque aquel a quien habían nombrado era desconocido para Madhusudan, y además se suponía que ese día no estaba en la ciudad. A los pocos minutos, la persona «A» entró en la habitación y dijo exactamente «esas palabras».

Otro exalumno proclamó que aquello que Swami le había dicho a él y a su madre en su primera entrevista, cuando él tenía seis años de edad, fue repetido por Madhusudan, haciéndole recordar al muchacho el incidente.

Otra persona dijo que Madhusudan le relató un incidente que le había ocurrido a esta persona mientras era un bebé, hecho que ella no conocía, y que fue posteriormente verificado por su madre, como ocurrió en mi caso.

Otra persona mayor, muy estimada y activa en los círculos Sai, dijo que Madhusudan comenzó la comunicación exactamente en el punto en que la habían dejado durante su última entrevista, en 2009. También le preguntó acerca del proyecto de agua que entonces le había encargado.

Otra persona refirió que había estado seriamente enferma en el hospital, sin poder moverse. Madhusudan dijo que Swami le había enviado un chocolate como prasadam, y que se pondría bien. Esta persona estuvo esa misma tarde en Muddenahalli, y habló sobre esta experiencia, diciendo que había sido un milagro de sanación.

He hablado con dos personas, una un antiguo estudiante, y otra un devoto, quienes me dijeron que pudieron ver a Swami caminando delante de Madhu. En las filas del darshan pudieron oírlo hablar, y a continuación Madhu repitió lo mismo a un devoto. Estas mismas personas refieren que durante un discurso, Swami estaba en la silla y Madhu estaba comunicando, mirando a Swami, y ellos podían oir cada palabra. Yo también he visto a Swami en la forma sutil, dos veces.

Hermano, he visto resurrección, sanación, omnipresencia, omnisciencia, omnipotencia y amor, y estoy convencido de que es ciento por ciento Swami. Finalmente, después de Su 90º cumpleaños, cuando otro exalumno y yo estábamos conversando, me di cuenta de que en los últimos años yo también había mejorado mi propio sadhana personal y comportamiento. Me he hecho más paciente, tolerante y amoroso de lo que nunca había sido antes. Soy capaz de aceptar a las personas tales como son, sin juzgarlas. De modo que nuestra relación con la forma sutil no nos ha alejado de Él en absoluto, ni nos ha hecho peores que antes. De todas maneras, respeto tus puntos de vista, y los de otros que no creen en esta forma, ya que todos tienen sus propias justificaciones y razones. En esta situación, pongámonos de acuerdo en no estar de acuerdo con las opiniones y experiencias de los demás.

Hermano, ninguno de nosotros debe usar un médium: necesitamos conectarnos y comunicarnos directamente con Swami en nuestros corazones. Esta situación era la misma mientras Swami estaba en el cuerpo físico, y sin embargo veníamos a verlo y hablarle. Este fenómeno es el mismo que ocurría estando Swami en el cuerpo físico. La forma física o la forma sutil son algo con lo cual nos conectamos al no poder tener una conexión interior con Él, todo el tiempo. Swami dijo: «Lo de Madhu es sólo la demostración de de que si una persona puede tener esta experiencia, todos la pueden tener. A menos que alguien salga a ver el mundo, ¿cómo podría contarles a los demás que existen otros lugares? Quedándonos en la India no podemos ver los EE.UU., pero sabremos de ese lugar si alguien que ha estado allí nos lo relata, o si vamos hasta allá». Él está demostrando que es posible para todos tener una conexión.

Acerca del fenómeno, cuando le pregunté a Swami por qué tuvo que abandonar Su cuerpo físico a los 85 años de edad, habiendo dicho que continuaría en él hasta los 96, el resumen de Su respuesta fue el siguiente. Esto ha sido compilado a partir de varias interacciones iniciales que tuve con Él en la forma sutil, no de una sola sesión. Sólo estoy capturando la esencia del tema, esto no es copia textual. También algo se ha perdido en la traducción del telugu al inglés. «La Tierra es una escuela. Ustedes son seres divinos que han descendido para una experiencia humana. En cada curso, los maestros son diferentes. En cada vida, escogen padres y también otras personas, para que sean sus maestros. En este plano (entiendo esto como 3D, donde existe el concepto de tiempo y espacio) existe el karma. Nadie puede escapar al karma. Allá, las reglas son diferentes (esto lo entiendo como el Bardo, o la 5ª dimensión, donde tenemos nuestro Yo Mismo superior). Toda vez que los devotos tenían problemas de salud y enfermedades, y me rogaban pidiendo socorro, Yo tomaba sus enfermedades sobre Mi cuerpo, y los salvaba. No puedo evitar el responder, cuando Mis devotos me ruegan que los salve. Dado que tomé las enfermedades de mis devotos, Mi cuerpo se debilitó. Yo no podía funcionar como hubiera querido, para completar todo lo que Yo mismo había planeado para el avatar Sathya Sai. Cuando Mi cuerpo estuvo tan débil que Yo tenía que depender de los demás para todo, decidí abandonar el cuerpo. Para cumplir con Mi palabra y todas las promesas que hice a la gente, seguiré sin Mi cuerpo, en esta forma sutil, que carece de cuerpo físico pero sigue siendo la misma en todos los demás aspectos. No estoy en Mi Para Sukshma Sarira, mediante la cual soy omnipresente y lo impregno todo. No estoy en mi Athi Sukshma Sarira, mediante la cual aparezco en los sueños, visiones y meditaciones de los devotos. Estoy en Mi Sukshma Sarira, que es ciento por ciento Swami, sólo que sin Mi cuerpo físico. En esta forma sutil, estaré completando todo lo que Yo mismo había planeado para este avatar. Mi misión continuará, como el flujo del Ganges. Ustedes pueden optar por ser parte de él o no ser parte de él, pero no pueden detener el flujo del Ganges».

Pregunté: «Swami, pero Tú eres Dios, eres la Divinidad; ¿por qué tuviste que tomar las enfermedades de los demás? ¿No hubieras podido simplemente neutralizarlas?». Swami dijo: «Soy el director de la escuela de la Tierra. Si Yo no cumplo con las reglas de la escuela, ¿cómo podrían cumplirlas los demás? Tengo que establecer un ideal, un modelo, siguiendo Yo mismo las reglas. Aquí nada puede ser neutralizado sin que haya alguien que lo reciba. Por lo tanto, Yo mismo tuve que recibir las enfermedades, y esto afectó Mi cuerpo físico».

«Swami, ¿por qué estuviste hospitalizado tantos días? ¿Por qué no Te fuiste inmediatamente cuando decidiste que Te irías?», pregunté. Swami dijo: «Quise prepararlos mentalmente a todos. De otro modo, la gente hubiera quedado tan conmocionada que muchos no habrían sobrevivido. Los preparé lentamente, por etapas. Aceptaron que yo estuviera en el hospital. Aceptaron que estuviera en terapia intensiva. Paso a paso, se dispusieron mentalmente a aceptar también que Swami podía abandonar Su cuerpo. Aún después de que hubiera dejado Mi cuerpo de esta manera, la gente dijo muchas cosas. ¿Qué les habría pasado a Mis cuidadores y demás, si Yo hubiera decidido un día abandonar repentinamente Mi cuerpo, directamente en el Yajur Mandir? Por eso, esta puesta en escena del hospital fue un plan divino necesario».

«Swami, ¿por qué no puedo ver la Sukshma Sarira?», pregunté. Swami dijo: «¿Quién dijo que no puedes? Mira el ejemplo del lago. Para que puedas ver el fondo del lago, tienen que ocurrir dos cosas. La primera es que el agua debe ser pura, sin lodo ni impurezas. La segunda es que el agua debe estar calma, sin movimiento alguno. Cultiva la pureza de la mente, y haz que tu mente esté quieta y en calma, y entonces podrás verme».
«Swami, pero quiero comunicarme contigo ahora», dije. Él replicó: «Bien. Hazme una pregunta». Le hice una pregunta, mentalmente. «La primera respuesta que oíste fue esta (me dijo lo que la voz había dicho). La segunda fue esta. ¿Correcto?», preguntó. Dije: «Sí, Swami». Él continuó: «La primera voz fue la Mía. La segunda fue la de tu mente. Hazme otra pregunta». La hice, y nuevamente Swami indicó cuál había sido Su voz y cuál la creación de mi mente. Dijo: «Es como una transmisión de TV. Primero captas la voz. Cuando sintonizas mejor, puedes ver la imagen, aún borrosa. Si sintonizas mejor aún, puedes verla claramente, en colores. Sí. Te conectas conmigo directamente. ¿Para qué querrías depender de otros? Recordarás que antes el darshan era una meditación. Ahora la meditación es Mi darshan. Necesitas practicarlo. Haz un hábito de conectarte conmigo todo el tiempo».

«Swami, tengo una pregunta más», dije. «¿Por qué no fuiste a otros lugares Tuyos, en vez de venir a este lugar?». Él replicó: «¿Qué podía hacer? (Emi Chesedi). En todos esos lugares han trabado las puertas de mis dormitorios, en Prashanti Nilayam, Brindavan y Kodaikanal. Sólo aquí la gente creía que estoy aquí. Mantuvieron abierto mi cuarto, cambiaron mis túnicas cada día, Me servieron diariamente desayuno, almuerzo y cena, limpiaron la habitación todos los días y Me sirvieron agua fresca todos los días».

«Pero Swami, no tienes cuerpo, ¿para qué necesitas desayuno, almuerzo, cena y agua?». Swami dijo: «Cuando tu padre hace las ceremonias (el día anual de las ofrendas a las almas que han partido) a tu abuelo y tu abuela, ¿vienen ellos a comer el alimento? Sí que lo hacen. Vienen en sus formas sutiles, y consumen el aspecto sutil de la comida y el agua. La comida y el agua también tienen formas sutiles. De la misma manera, cuando en los templos se ofrece a Dios la Naivedyam, u ofrenda consagrada, ¿acaso desaparece el alimento? No. Dios consume la forma sutil del alimento, y éste se convierte en prasadam. Lo mismo sucede cuando Yo estoy en Mi sukshma shareera. Necesito un lugar donde residir, tal como antes, ya que soy El mismo, menos el cuerpo físico».

«Swami, ¿para qué necesitas un automóvil?» pregunté. Aquí debo comentar que antes, Madhu llegaba normalmente en su propio automóvil, y Swami aparecía en el momento señalado, y comenzaba a comunicarse usándolo a él como un instrumento. Swami respondió: «No necesito un automóvil. Cuando voy a otros lugares, viajo a a través del akaasha maarga (que significa la ruta etérea). Dado que el resto de ustedes no Me puede ver, y quieren sentir Mi presencia, ¿cómo sabrían que He llegado en Mi cuerpo sutil? Utilizo el automóvil para que lo sepan».

Más importante es lo siguiente. Si Swami dijo que estaría aquí hasta los 96 años de edad, Su palabra tiene que ser cierta, ¿verdad? Si Swami dijo que visitaría países extranjeros, su palabra tiene que ser cierta, ¿verdad? ¿De qué otra manera se puede explicar esto? Nunca ha ocurrido que un fantasma se posesione de alguien y construya hospitales y escuelas en nombre de otro. Swami, en Su forma sutil, es todo aquello que Su avatar representaba, menos la carne y los huesos (el cuerpo físico). Para comprenderlo, tienen que experimentarlo. Su Jeeva Prajna (que es la identificación con un nombre y una forma determinados), existe tal como antes, junto con su Daiva Prajna (conciencia divina).

Swami nos dice repetidamente, también ahora: «Conéctense conmigo en sus corazones. No dependan de otros. Antes, en Prasanthi Nilayam, estaban apegados a Mi forma física. Eso era una representación teatral. Ahora están apegados a la forma sutil. Esto también es una representación teatral. Dénse cuenta de que Yo soy el antarayami (el morador interno) de ustedes, y su Hridaya Nivasi (el que reside en sus corazones). Hagan que sus mentes sean puras y quietas, manteniéndose en contacto conmigo, sin depender de los demás».

Hermano, ¿no fuiste acaso a Prasanthi Nilayam cuando Swami estaba en Su forma física, aunque sabías que Él estaba en tu corazón? ¿Por qué? Sabías que el Señor que estaba en tu corazón, también estaba allí fisicamente. Estar en Su Divina Presencia era una experiencia diferente. ¿No vas ahora al Samadhi y sientes Su Divina Presencia de un modo diferente? Si no, ¿por qué viajarías ahora a la India, en lugar de buscarlo a Él en tu corazón, allá en el Reino Unido? De la misma manera, yo estoy consciente de que puedo conectarme con él, y me conecto con Él la mayor parte del tiempo. Uso el «instrumento» Madhu sólo cuando lo necesito. Esto se debe a que Él aún está, sin Su cuerpo físico. Swami está aún aquí, tanto como estaba antes allá. Nada ha cambiado. Es el mismo Sathya Sai, ya sea que Lo aceptes o no; ya sea que lo certifiques o no. Quienquiera que haya experimentado la forma sutil, cree en Él y conoce esta verdad. Incluso Indulal Shaji Lo vio en la silla, hablando con Madhu, mientras Madhu repetía lo que Él decía. Incluso yo Lo he visto. Hay muchos que Lo han visto. Si bien yo puedo conectarme directamente con Él, toda vez que estoy pasando por alguna ansiedad o tensión nerviosa, carezco de la pureza y la quietud necesarias para verlo, comunicarme con Él y confiar en que se trata de una experiencia auténtica. Hasta que yo evolucione, mediante el sadhana, hasta ese nivel en que pueda estar conectado con Él todo el tiempo, necesitaré seguir yendo a Prasanthi Nilayam, Muddenahalli, Shirdi, Brindavan, etc. Seguiré usando el «instrumento» Madhu para comunicarme, toda vez que necesite Su guía, como ocurría mientras Él estaba en Su cuerpo físico y yo necesitaba una orientación crucial.

―VijayaSai B.S.

Descargar el archivo: Testimonio de VijaySai