RETIRO DIVINO – Kodaikanal – 15 de mayo de 2019
La semana transcurrida trajo muchos momentos de alegría y risas, así como de asombro y admiración a todos los estudiantes, personal e invitados que estaban disfrutando del amor de su Maestro divino, Bhagavan Sri Sathya Sai Baba. Desde hacer chanzas con Sus hijos hasta describir Su visión para proyectos de agua y centros médicos; de abrazar a todos con Su amor maternal hasta revelar Su Plan maestro insondable, Swami realmente dio una vislumbre dentro del corazón de Dios, que es ciertamente muy amoroso, compasivo y benevolente. De hecho, previamente habló sobre Su deseo de proporcionar algunas instalaciones médicas para los refugiados tibetanos de Kodaikanal, debido a que no reciben los beneficios de ser ciudadanos de la India y, por lo tanto, no pueden pagar la atención médica básica. Swami en Su infinita misericordia también dijo que dado que les era difícil seguir subiendo la colina para llegar al centro médico, Él construiría algo para ellos en un lugar más accesible. Tales Divinos momentos de amor infinito por todos Sus hijos fueron muy bienaventurados de atestiguar y reveladores de la constante preocupación maternal de Bhagavan por Su creación.
El último día del retiro de Kodaikanal siempre está lleno de emoción y gratitud al bienamado Señor por permitir que todos disfruten de Su Divino amor, y mientras los devotos se dirigían a la Sala de Oración después del desayuno, Swami llegó a las 10.30 a.m. en medio de los melodiosos Bhajans. Se sentó por unos pocos bhajans antes de instruír al hermano Vijay Sai para que comenzara los procedimientos de la mañana.
Como la gratitud es siempre el tema del último día de retiro de Kodai, el Señor bendijo a cada uno de los voluntarios que trabajaron incansablemente durante la semana, cocinando, limpiando y cuidando a todos los invitados y estudiantes. Él habló acerca de la importancia de la gratitud y de contar las bendiciones de uno, agradeciendo al Señor por todo lo que Él da, porque siempre es más de lo que se merece. Haciendo hincapié en adoptar una actitud de gratitud, Swami puso fin a la mañana de Satsang y se le ofreció Mangala Arati. A partir de entonces, el Prasadam se distribuyó a todos y Bhagavan regresó a Su residencia para un breve descanso, mientras todos los estudiantes, el personal y los invitados se reunían bajo el toldo erigido en los jardines del Bungalow, ¡que fue levantado durante la noche para una sesión de juegos llena de diversión con el Señor!
Cada año, el ‘picnic’, como lo llama Swami, evoca mucho entusiasmo y alegría infantil entre los jóvenes y los mayores, y es una jovial ocasión en la que todos participan en una prueba con el Señor actuando como el Maestro y juez general.
Después de un tiempo, Swami descendió de Su habitación, se deslizó hacia los jardines y subió al estrado donde habia un hermoso Jhoola (un columpio de plata) para Él. A partir de entonces, los organizadores, el hermano Vijay Sai y su esposa Smt Vidya comenzaron la sesión dando la bienvenida a Swami y presentando las reglas del cuestionario. Empezando con una ronda de Anthakshari (un juego indio) y continuando con preguntas sobre la vida y la misión de Swami, Bhajans, adivinanzas e incluso sillas musicales para los mayores, la mañana estuvo llena de diversión y risas. Como siempre, Swami derramó muchas de sus señales de gracia en el equipo de estudiantes, pero al final fue el personal el que ganó los juegos y reclamó muestras del amor de Swami. No obstante, el compasivo Señor arrojó lluvias de chocolates para todos y se aseguró de que cada uno hubiera recibido algo de Él. Después de que se ofreció Mangala Arati, regresó a Su residencia para compartir el almuerzo con los mayores.
En la noche, Bhagavan amorosamente vino temprano para compartir fotografías con todos los mayores, estudiantes, personal y devotos en los jardines de Su residencia. Después de tomar algunas fotografías, comenzaron las rafagas de lluvia y Swami aseguró que tomaría fotos con aquellos que no habían tenido la oportunidad, a la mañana siguiente. Mientras todos regresaban al bungalow, Swami también entró y se sentó en un hermoso Jhoola en el lugar de Su trono. Desde que el último día del retiro de Kodaikanal se pasa tradicionalmente expresando gratitud al Señor, también este año se preparó un programa de agradecimiento de discursos y canciones. Swami solicitó a la pequeña Saisha Tappoo, hija del hermano Sumeet Tappoo, que comenzara el programa con un discurso que había preparado. Exponiendo su corazón en gratitud y oración, ella cantó entonces tres emotivas canciones en inglés, haciendo muy feliz al Señor.
Esto fue seguido por una selección de canciones en hindi, telugu e inglés, muchas sobre el tema de la gratitud a la madre junto con algunos discursos en inglés.
A partir de entonces, Bhagavan habló sobre la importancia de la gratitud y de estar reconocido por lo que haya sido dado, sin compararse con otros. Al afirmar que es importante conservar la propia dignidad y sólo asistir a un evento cuando uno ha sido invitado, Swami narró la historia de Daksha Prajapati y su Yajna (una antigua historia mística). Cuando Daksha Prajapati, padre de la Madre Parvati o Sati, organizó un Yajna, invitó a todos los dioses y semidioses, excluyendo sólo a su hija y yerno, Shiva. Sin embargo, sintiendo que quería asistir al Yajna en la casa de su padre, Sati vino y fue insultada por su propio padre, quien ignoró su presencia. Incapaz de soportar esto, corrió hacia el fuego del sacrificio y esto causó que Shiva se enojara mucho y creara a Virabhadra (una forma temible del mismo Shiva) para causar destrucción. Shiva luego cortó la cabeza de Daksha Prajapati, pero atendiendo a los ruegos de Su esposa, no lo mató y en su lugar le dio la cabeza de una cabra. Shiva luego tomó el cuerpo de Sati y, al caer las distintas partes de su cuerpo en diferentes lugares, surgieron los sagrados Shakti Peethas.
Swami así enfatizó que sea que Él conceda lo que uno quiere o lo que no quiere, la persona debería entender que debe haber una razón para todo y aceptar lo que se da con dignidad. Dijo que la calidad de la devoción incondicional es lo que se espera de un devoto.
Si algun acto es hecho por ignorancia o insensatez, puede ser perdonado, pero si es hecho con Ego, Dios no lo excusará. Si hay un gran recipiente de Payasam (un arroz dulce), incluso una gota de veneno es suficiente para estropear todo el contenedor. Del mismo modo, si toda su Sadhana esta rebajada con ego se desperdiciará. En los próximos tiempos habrá muchos cambios. Si tienen ego no podrán aceptarlos. En tal caso, podrán decir: ‘¿Por qué sucedió esto? ¿Cómo puede pasar algo asi? Si realmente es Swami, ¿puede suceder de este modo?’ Bien, déjenme decirles que iSwami puede hacer cualquier cosa, en cualquier lugar y de cualquier manera! Pero si tienen ego, entonces empezarán a cuestionarme, ¡y se alejarán de Mí! Sólo cuando no posean ego, podran resistir lo que sucederá en el futuro y ¡NO LES DIRE ESTO OTRA VEZ! ¡Estos Leelas Míos estan siendo ahora desplegados a través del cuerpo de Madhusudan, ¡y sólo pueden ser comprendidos por aquellos libres de ego!
Luego, Swami explicó las tres etapas de ser un devoto del Señor y dijo que estas son: Dehaprajna o conciencia corporal, Jivaprajna o conciencia del alma individual y Daivaprajna o conciencia de la divinidad innata. Si bien cada persona tiene conciencia del cuerpo, la tarea del devoto es canalizar esta conciencia hacia un sentimiento de ser un servidor del Señor. Uno debe pensar y sentir que el Señor sabe mejor y hacer lo que el Señor le ordena como un simple servidor sin pensamiento individual. Sin embargo, cuando uno tiene conciencia del Jiva o del ser, cada vez es más consciente de su propia divinidad y siente que es una chispa de lo divino. Por lo tanto, en esta etapa uno se vuelve como un Yogui y es guiado por lo divino. Finalmente, el último estadio es el más alto cuando una persona se da cuenta de su propia Divinidad, actúa como Divina, piensa como Divina y es una con la Divinidad. Swami explicó que incluso si uno no tiene Daivaprajna, el devoto debe al menos sentir que es un servidor del Señor y tener una devoción y fe incuestionables.
Asi, esta progresión a través de las tres etapas es exactamente lo que uno ha estado viendo con el Hermano Madhusudan cuando pasó de ser un servidor del Señor a un destello de lo Divino. Swami continuó diciendo que la transición de Jivaprajna a Daivaprajna (del alma individual a la conciencia Divina) se hará visible muy pronto. Por consiguiente, dijo que para comprender a Swami y continuar estando en Su proximidad, uno debe deshacerse completamente del ego y rendirse a Él.
Luego instruyó a Sri B N Narasimha Murthy para que hablara, ya que era el último Satsang del retiro. Él elaboró más sobre los tres estadios de conciencia y cómo todos los devotos deben ser conscientes de que la transición a Daivaprajna o conciencia divina es inevitable, ya que este es el camino para realizar nuestra propia divinidad. Después de ofrecer gratitud a todos aquellos que habían trabajado tan dedicadamente para permitir que se llevara a cabo este retiro, Sri Narasimha Murthy concluyó su charla y Mangala Arati fue ofrecido a Bhagavan. A partir de entonces, se distribuyó Prasadam y Swami se dirigió a Su habitación para entrevistas, antes de la cena.
Fuente: Sri Sathya Sai Vrinda