Sunil Gavaskar, una leyenda del críquet, comienza su nuevo período de juego en la vida, comprometiéndose a financiar las operaciones quirúrgicas de 34 niños con cardiopatías congénitas, en el Hospital «Sri Sathya Sai Sanjeevani» de Karghar, Nueva Mumbai (India).
Galardonado con el premio nacional Padma Bhushan, compartió su sentido aprecio por el trabajo desinteresado que se realiza en el Sanjeevani, y expresó su compromiso hacia #HealingLittleHearts (Curando corazoncitos).
Habiendo visitado los centros Sanjeevani de Raipur y Palwal, vi el magnífico trabajo que se está haciendo. Cuando el Sanjeevani vino a Mumbai, y siendo Mumbai donde yo crecí, hubo una conexión más inmediata, y realmente quise ayudar de alguna manera.
Soy lo que soy, conocido por los puntajes que he acumulado … y si puedo hacer esta pequeña contribución, en la cual por cada puntaje que he alcanzado pudiera salvar una vida, me sentiría bendecido, y esa es la razón para esto.
Este es mi tercer tiempo. Jugar el juego fue mi primer tiempo, estar involucrado en los medios fue mi segundo tiempo, y estoy convencido de que mi tercer tiempo será el mejor de todos.
El motivo de que esté hablando aquí es como en el juego de críquet, donde el bateador que actúa en primer lugar pone los cimientos para que el resto del equipo desempeñe su parte y haga una contribución. Mi pedido para ustedes es que difundan el mensaje y cuenten al mundo el trabajo que se está realizando aquí, para un mundo más sano y mejor.
—Sunil Gavaskar, una leyenda del críquet
Fuente: Sai Vrinda
