VISITA DIVINA – Laos – 19 de marzo de 2019

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VISITA DIVINA – Laos – 19 de marzo de 2019
 
Durante la primera venida de Swami a Laos en 2018, habia visitado una escuela que esta siendo dirigida basada en el sistema de educación integral Sathya Sai. En ese momento, Él instruyó que se construyera una escuela secundaria en dos años, lo que ayudaría a los estudiantes a continuar su educación. Entonces, todos los devotos en Laos se encargaron de asegurarse de que las palabras de Swami no fallarían. La tierra adyacente a la escuela existente fue comprada, de modo que Bhagavan Sri Sathya Sai Baba pudiera bendecir la tierra y el Bhoomi Puja se ejecutara durante la visita de este año.
 
Asi, poco después del desayuno, Swami se dirigió a la tierra para el Bhoomi Puja junto con Su comitiva. Se realizaron los rituales tradicionales, y Swami luego marchó al edificio de la Escuela Primaria para bendecir a todos los niños y al personal. Fue uno de los momentos más dulces, y los niños lo recibieron en medio de ellos, plenamente conscientes del hecho de que «Baba» estaba entre ellos. Swami caminó alrededor de las aulas interactuando con los niños, y procedió a inaugurar el nuevo Laboratorio de Computación. Este fue otro mandato del Señor, que dio frutos esa bendita mañana. A partir de entonces, caminó por el patio de recreo y fue a bendecir el Centro Médico, que no sólo atiende a los niños y sus padres, sino también a cientos de personas que viven en esa área. Una vez más, siguiendo la orientación de Swami, el proyecto de evaluación Madre y Niño fue establecido y Swami visitó la sala de consulta, antes de subir hasta el primer piso donde todos los niños y miembros del personal se habían reunido para ofrecer una presentación cultural.
 
El programa comenzó con el Director de la Escuela dándole una emotiva bienvenida a Swami entre ellos. Durante los siguientes 15 minutos más o menos, todos los niños cantaron Vedam al unísono. También aprendieron el Nirvana Shatakam, y para deleite de Swami y de todos los que se reunieron, cantaron los versos desde el corazón, ¡que habían aprendido en tres días! Las oraciones budistas también fueron cantadas, y esto fue seguido por bailes tradicionales.
 
Swami luego se dirigió a todos los niños y dijo, “Aun cuando el aire existe, no podemos verlo. Del mismo modo, Dios está presente, aunque no lo podemos ver. Cuando estamos felices y alegres, debemos saber que Dios está cerca. Si no respiramos por unos segundos, no podemos vivir y ser felices. De la misma manera, si Dios no está allí aun por unos pocos segundos, no podemos ser felices. Swami desea que una escuela más grande venga aqui y que los niños no tengan que ir muy lejos para continuar su educación”. Bendijo a todos los niños para que tengan un buen nombre para ellos mismos, su escuela y su país. Swami predijo que la escuela se convertiría en una Universidad y que abarcaría a los niños no sólo de Laos, sino de los países vecinos también. Después de entregar Prasadam a los niños, regresó a Su morada para el almuerzo.
 
En la noche, cerca de cien devotos se habían reunido para disfrutar de la presencia de su divino Maestro. Swami dijo: “Al igual que los devotos están felices de estar con Dios, más feliz es Dios de estar con Sus devotos. Los niños están felices de estar con la madre, que está más que feliz de estar con los niños. La relación entre madre e hijo es inseparable, ¡y esta es la relación entre Dios y Sus devotos también! Donde hay devotos de corazón puro, uno debe estar seguro de que Dios también está presente allí. Al igual que cuando un niño grita, «Madre», dondequiera que la madre esté, ella viene corriendo al lado del niño, del mismo modo cuando los devotos oran con un corazón puro, no hay otra opción para Dios sino estar presente a su lado. Este es el vínculo inseparable de amor entre Dios y Sus devotos.
 
Sólo en buena compañía – ‘Sangham’ – pueden surgir buenos pensamientos que conducen a buenas acciones, y eso es lo que significa ‘Dharmam Sharanam Gacchami’ (en el contexto budista). Finalmente, donde hay bondad hay Dios allí y uno realiza la propia divinidad a través de las buenas acciones, que es el logro final de «Buddham Sharanam Gacchami», es decir, que uno se convierte en Buda o el Despierto. Esto es lo que el Señor Buda también enseñó. Así que comienza con Sangha (buena compañía), que conducirá a Dharma (conducta recta) y, finalmente, a Buda (o liberación).
 
Por consiguiente comienza con una buena compañía que conduce a buenas obras, buenos deseos, buenas ideas, buenas maneras y eso es lo que lleva a Dios. Así que, estén siempre en buena compañía, mantengan Satsang, mantengan buenas ideas, buenas asociaciones a su alrededor. Entonces siempre estarán en la presencia de Dios.
 
Siempre digo, huyan de las malas compañías – no sólo aléjense , sino que escapen de las malas compañías de personas mundanas que tienen demasiados deseos mundanos. Tengan deseos puros. El deseo más puro es tener siempre la gracia y el amor de Dios en sus vidas. Un niño recibe el amor de la madre cuando se porta bien, ama a la madre, escucha a la madre y hace lo que es bueno. Del mismo modo, el devoto que sigue el camino de Dios, ama a Dios, ama a los demás, sirve a los demás, se sacrifica por el bien de los demás y tiene un buen nombre, es el más querido para Dios. Si son queridos por Dios, estarán cerca de Dios. Más que ser queridos, todos ustedes estarán cerca de Él. Él siempre estará con ustedes, nunca los dejará”.
 
Mangala Aarti fue ofrecido y Swami se retiró para la noche después de la cena.
 
Fuente: Sai Vrinda