¿PARA QUÉ SON TODOS ESTOS PROYECTOS?
por Sri Madhusudan Naidu
Muddenahalli, 3/11/2018
“¿Para qué son estos proyectos? ¡Ayudarlos a evolucionar como seres humanos, es ayudarlos a deshacerce del sentido de ser el ‘hacedor’, de sus apegos!»
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Es tan glorioso escuchar «La devoción hace a lo Imposible, Posible», «Todo esto sucede debido a la devoción a Swami y al amor de Swami por nosotros», las oportunidades que aferramos con ambas manos y ser los guerreros de Swami y hacer las cosas, hace que Su voluntad suceda. ¡Todo está bien! Pero al mismo tiempo, también debo advertirles. ¡Hay veces en que Swami dice algo y las cosas aún así no suceden! Y eso es nuevamente por una razón.
Swami dice vayamos adelante y hagamos eso. Y cuatro personas se juntan. ¡Y todos piensan este, oeste, norte, sur! Nadie puede unirse porque se olvidan de dejar de lado sus individualidades, sus egos, sus apegos, sus ideas por el mayor beneficio de su proyecto o la sociedad o simplemente para hacer que la voluntad de Swami se cumpla. ¡Entonces las cosas se desintegran!
Estábamos pasando por un momento muy difícil en uno de los proyectos. Estaba en el extranjero y fue entregado a cierto grupo de devotos que se suponia debían ejecutar ese proyecto para Swami. Hasta ahora todo se veía como si fuera una locura. Estábamos felices y Swami también estaba feliz. Luego vimos algunas divisiones y fricciones entre los miembros y, lentamente, el proyecto comenzó a funcionar de esta manera, esa manera y hubo confusión. Le pregunté a Swami sobre una base muy personal, «¿Por qué sucede eso? Querías que el proyecto se realizara, ciertas cosas debían ocurrir y, según tu propia voluntad pones a cuatro personas juntas para que suceda, y entonces, ¿por qué se enfrenta algún tipo de crisis y se interrumpe debido a Tu Sankalpa, que Tú proclamas y hemos visto y experimentado que es Vajra Sankalpa, algo que no se puede cambiar. Una vez que lo decretas y dices que esto es asi, ¡tiene que ser eso! No hay dudas al respecto. Entonces, ¿por qué las cosas no acontecen de la manera en que se suponía que debian suceder?»
Swami dijo,
“¿Para qué son estos proyectos? ¿Para ayudar a unos cuantos niños más a educarse? ¿Para ayudar a unos pocos pobres más a conseguir comida? ¿Para ayudar a unos pocos enfermos más a volverse saludables? ¿Para ayudar a algunas personas abandonadas a buscar refugio? ¡Tal vez sí! Pero eso es parte secundaria de ello. ¡La razón principal por la que hago esto o creo estas oportunidades es para ayudarlos a evolucionar como seres humanos, es para ayudarlos a deshacerce de su sentido de ser los ‘hacedores’, de sus apegos! Sólo entonces soy feliz. No porque haya surgido un gran edificio. No porque tantos niños hayan recibido educación, o que muchos han sido curados. Eso también es parte del juego. Pero la razón principal por la que estamos en esto es para su propio bien personal, para que sean mejores personas. Si su ego es tan enorme que no les permite pensar lo que está bien o mal, no les permite ir más allá de los límites de «yo» y «mío», entonces no tengo más remedio que detener el proyecto. Esa es también Mi voluntad. Porque, si les permito que continúen con eso, sólo se harán más daño a ustedes mismos y a todos los que los rodean. Entonces, tengo que pararlo ahí. ‘Ya se ha hecho suficiente daño, por favor siéntense y hagan introspección, aprendan de lo que sucedió y cuando sean una persona cambiada, ahi nos reuniremos de nuevo y hablaremos otra vez’…».
Swami también pone una pausa cuando siente que nuestro sentido del ‘hacedor ‘, nuestras individualidades son más una obstrucción que una ayuda en Sus caminos. Por lo tanto, tenemos que estar en guardia todo el tiempo porque es muy fácil recaer en el ‘hacedor’. Y cada vez que entremos en ello, Él pondrá un stop. Dirá, creo que vas demasiado rápido. Puede provocar accidentes. Disminuyamos la velocidad o paremos todo junto por ahora. ¡Detente!
Entonces, Swami también hace esto muy a menudo. A menos que seamos tan puros, que estemos aquí sólo por Dios, y para hacer sólo Su voluntad, es posible que en algún momento nuestra propia mente entre a jugar, a actuar y se convierta en un obstáculo en nuestro propio progreso. Cuando escuché la canción, donde se hace una oración a Khuda (Dios), «Karde Mujhe, Mujhse Hi Riha», que significa «Por favor, libérame de mis propias cadenas». Nadie me ha encarcelado ni encadenado. Es mi propia creación. Es mi propio hacer. «Sálvame de mí mismo porque soy el mayor problema para mí. Y soy la causa de mi desdicha» Eso es tan apropiado porque, como dice Swami, nadie nos hace daño, nadie nos ayuda. Somos nosotros los únicos responsables de lo bueno y lo malo que nos sucede.
Quería dejarlos con una pizca de escepticismo de que también debemos tener cuidado al hacer el trabajo de Swami. Obviamente, todos queremos hacer lo que Swami quiere porque eso es lo que nos da el mayor impulso en la vida. Eso es lo que nos hace realmente felices. Al mismo tiempo, tenemos que ser muy cuidadosos y precavidos, en ningún caso, debe suceder que nuestra idea o nuestras individualidades se vuelvan tan poderosas que obstruyan Su voluntad. Eso también es parte de nuestro entrenamiento, nuestra evolución colectiva aquí.
– Sri Madhusudan Naidu en ‘Tattva Sameeksha’ (3 de noviembre de 2018), Sathya Sai Grama, Muddenahalli
(‘Tattva Sameeksha’ es una sesión de Charla de oradores eminentes a los residentes del Ashram de Sathya Sai Grama en Muddenahalli)
Fuente: Sri Sathya Sai Vrinda