BHAGAVAN Y SU AMOR POR UN DEVOTO MUSULMAN – por el Profesor Abdul Razak Korbu

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BHAGAVAN Y SU AMOR POR UN DEVOTO MUSULMAN

por el Profesor Abdul Razak Korbu

Compartimos un extracto del libro ‘Sai Sathya Sakha’, por el Prof. Korbu – Primera edición, noviembre 2009

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«Para enero de 1993 Baba me había invitado a traer a mi esposa a Puttaparthi. Mi esposa rechazó abiertamente esta solicitud. Le supliqué muchas veces usando variadas persuasiones: «No te estoy forzando a ir a ningún templo en Puttaparthi, ni a hacer namaskar a Sai Baba ni a inclinarte ante Sus pies. Simplemente me acompañarás. ¿No se dice que la esposa debería ver al esposo como un guía espiritual?» Ella replicó agudamente: «No cites las escrituras a tu favor. ¿Por qué me obligas a ir allí?» «No te estoy forzando», le dije.»Es Sai Baba mismo quien te ha llamado». Entonces, para mi mayor alivio, dijo: «Muy bien, voy a ir a condición de que no haré namaskar delante de nadie y no me inclinaré ante los pies de nadie».

El segundo día de nuestra llegada, Baba nos llamó para una entrevista. Mi esposa entró a la sala de entrevistas con una cara taciturna. Ella no hizo namaskar ni se inclinó ante los pies de Swami. Sin embargo, en el rostro de Swami había una sonrisa celestial. Intenté disculparme con Swami diciendo: «Baba, por favor, perdónala». Y Swami dijo: «Cállate, hablas demasiado». Mi esposa me dio una fuerte mirada de reprobación.

A continuación hay una traducción al inglés de la breve conversación entre Baba y mi esposa en hindi.

Baba: «¿Cómo estás, mi bachhi (niña)?»

Mi esposa no tenía ganas de responder, pero la palabra Bachhi la hizo abrirse. Mirando al piso, ella respondió.

Naseem: «Estoy bien».

Baba: «¿Cuántos hijos tienes?»

Naseem: «Cuatro. Tres hijos y una hija».

Baba: «¿Qué hacen ellos?»

Naseem: «Dos están practicando leyes. Dos están estudiando. La hija está haciendo medicina».

Baba: «Muy bien. Estoy muy feliz».

Después de esto, mi esposa se sintió mejor, pero yo estaba intranquilo. Entonces Baba se volvió hacia mí y me preguntó acerca de mis clases en la universidad.

Baba: «Abdul, dime si deseas algo de Mí».

Abdul: «Nada Baba. Pero …»

Antes de que pudiera completar la oración, Baba indicó con Su mano que dejara de hablar. Aunque Baba me dijo que preguntara, no estaba en el estado mental adecuado para hacerlo. Naseem estaba sentada en la posición meditativa de Namaaz, con la cara mirando hacia abajo y ambas manos dobladas sobre sus rodillas.

Para mi esposa, Baba dijo nuevamente «Meri bachhi» (Hija Mía). Fue muy conmovedor cuando Baba la llamó «¡Meri bachhi!» Naseem se aflojó un poco y por primera vez levantó la cabeza para mirar a Baba. De una manera muy informal, Baba le preguntó: «¿No quieres tu propio hijo?»

Ahora me volví completamente relajado. Con esta pregunta, Baba miró a Naseem a los ojos sin pestañear. Naseem estaba paralizada con sus ojos mirando solo a Baba. Esta Divina Comunión continuó por un corto tiempo. Entonces, de repente, como atraída por una fuerza invisible, cayó sobre los pies de Baba y murmuró quejumbrosa: «¡Oh, Mere Baba!». (¡Oh, mi Baba!) Todo su cuerpo estaba temblando. ¡Estaba llorando profusamente y lavando los pies de Baba con sus lágrimas! Estaba a punto de acercarme a ella y ayudarla, pero Baba me indicó que me quedara en silencio. Baba recogió su pañuelo, se limpió la cara y los labios, y se sentó a gusto. Excepto por el sonido de los sollozos de Naseem, habia un silencio de caída de alfiler.

Después de unos minutos, Baba dijo «Utho mere bachhi» (levántate hija Mia). Naseem logró levantarse y sentarse. En su mano sostenía un pliegue de la tunica de Baba que estaba colgando en el suelo.

Baba me miró, mantuvo Su mano sobre mi hombro izquierdo y me dijo que me sentara al lado de mi esposa, que seguía llorando. Sin dejar de mirarme, Swami dijo: «Esta dama está embarazada a partir de este momento. Ella dará a luz a un hijo muy inteligente en un día nacional importante. Ella dará a luz un hijo más en otro día importante».

Oh! Me quedé boquiabierto y asombrado. Poco a poco, dije: «Baba, los médicos confirmaron que …». Baba dijo: «¿Qué médicos? ¡Doctores: soy el doctor de doctores!» Naseem y yo entendimos, y los dos caímos de nuevo a Sus pies. De esta manera, Naseem hizo dos postraciones de ‘Sai Namaz’.

Como prólogo de este Drama Divino, debo narrar que me casé con mi segunda esposa, Naseem, hace unos ocho años. Ella no tuvo ningún hijo durante mucho tiempo, por lo que consultamos a ginecólogos en Kolhapur que declararon que no le era posible concebir debido a obstrucciones internas, el tipo de sangre, etc. Pero Naseem amaba a mi primera esposa y a sus cuatro niños sin ninguna reserva. Y los niños también la amaron mucho. Esa fue la razón por la cual cuando Baba preguntó: «¿Cuántos hijos?». Ella dio una respuesta firme, «Cuatro».

Después de regresar de Puttaparthi, en el segundo día fui a la Dra. Meenatai y le dije que Naseem estaba embarazada y daria a luz un hijo y luego un segundo hijo. Meenatai me miró dubitativa ya que había revisado minuciosamente a Naseem justo antes de irnos a Puttaparthi. Luego narré a Meenatai todo lo que había sucedido en Prasanthi Nilayam. Ella y los miembros de la familia Bhadre eran devotos de Sai Baba de Shirdi. Ella sospechaba de Sathya Sai Baba. Sin embargo, dijo: «Estoy de acuerdo en que esto solo es posible por la Voluntad Divina». En la fecha señalada, llevé a Naseem a la clínica. Después de realizar el examen médico necesario, informaron que «el embarazo ha sido clínicamente confirmado». De esta manera, según la Divina Voluntad de Baba, Naseem dio a luz a su primer hijo el 2 de octubre de 1993 coincidiendo con el centenario de nacimiento de Mahatma Gandhi, ¡un día nacional importante! Swami mismo realizó la ceremonia de nombramiento y le dio el nombre ‘Sai Baksh’, que significa ‘Regalo de Sai ‘. Naseem dio a luz a su segundo hijo, un niño, el 19 de noviembre de 1994. ¡Este día es la fecha de nacimiento de Indira Gandhi! La ceremonia de nombramiento se realizó en nuestra casa y el niño fue llamado ‘Sai Kalam’ según el deseo de Baba. Los versos sagrados del Corán se llaman ‘Aayat’ y la segunda línea del ‘Aayat’ es llamada ‘Kalam ‘…»

Fuente: Profesor Abdul Razak Korbu