ANÉCDOTAS DE SHIRDI SAI BABA
Es bien sabido que Baba tomó Dakshina (donación) de todos, y de la cantidad así recaudada, gastó mucho en caridad y compró combustible con el saldo restante. Este combustible lo arrojó en el Dhuni, el fuego sagrado, que él siempre tenía encendido. La ceniza de este fuego se llamaba Udi (vibuthi) y se distribuyó libremente a los devotos en el momento de su partida de Shirdi.
¿Qué enseñó o insinuó Baba con esta Udi? Baba enseñó con su ceniza sagrada que todos los fenómenos visibles en el universo son tan transitorios como la ceniza. Nuestros cuerpos compuestos de madera, o materia de los cinco elementos caerán, después que todos sus goces hayan terminado, y se reducirán a cenizas. Para recordarles a los devotos que sus cuerpos serán reducidos a cenizas, Baba les distribuyó esta ceniza. Baba también enseñó con su ceniza que el Brahman es la única Realidad y que el universo es efímero, y nadie en este mundo, ya sea un hijo, padre o esposa, es realmente nuestro. Venimos aquí (a este mundo) solos, y tenemos que salir solos. Se descubrió, e incluso se descubre, que la ceniza curó muchas enfermedades físicas y mentales, pero con su ceniza (Udi) y donación (Dakshina) Baba quiso despertar en los oídos del devoto los principios de discriminación entre lo irreal y lo real y el no apego a lo irreal. El primero, la ceniza, nos enseñó la discriminación, y el segundo, la donación, nos enseñó el no apego. A menos que tengamos estas dos cosas, no es posible que crucemos el mar de la existencia mundana. Así que Baba pidió y tomó donación, y mientras los devotos se despedían, les dio la ceniza a título de Prasad, con una parte untó la frente de los bhaktas (devotos) y colocó su mano conferidora de bendiciones sobre sus cabezas. Cuando Baba estaba de buen humor, solía cantar alegremente. Una de esas canciones era sobre el Udi. La letra de la canción de Udi era la siguiente: «Oh, juguetón Rama, ven, ven y trae contigo sacos de Udi». Baba solía cantar en tonos muy claros y dulces.
El Udi tenía una implicación espiritual, tanto como su importancia material. Confería salud, prosperidad, ausencia de ansiedad y muchos otros logros mundanos. Entonces, la ceniza nos ha ayudado a obtener ambos fines, tanto materiales como espirituales.
Fuente: Sri Sai Satcharitra