“Yo los conozco a todos. Todos ellos me conocen. ¡Eso es más que suficiente!”
Swami estaba yendo a otro lugar nuevo y cada vez que va a un lugar o país nuevo y se reúne con gente nueva, ¡es como Agni Pariksha (la prueba de fuego) para mí! Yo siento: “¡Oh, Dios! Otra vez tengo que reunirme con gente nueva y estas personas comenzarán a cuestionar, investigar, a dudar de mí y cada movimiento mío, cada gesto, cada mirada, cada palabra será sopesada con la experiencia que han tenido en el pasado”. Van a hacer todo ese juicio. Es muy difícil. Es como pasar por un examen. Pero la misión de Swami debe expandirse. Y nadie puede decirle a Swami, haz esto o por favor, no hagas aquello. Él es el maestro de Su propio ser. Entonces, cuando Swami dijo: “Iremos a este lugar nuevo”, sentí algo de incomodidad. Y conocer a los devotos que han sido devotos durante décadas es un gran problema para mí. Los devotos nuevos son abiertos de mente y no cargan equipaje. Pero los devotos del pasado tienen muchas preguntas. “¿Swami dirá algo de lo que me dijo en 1960? Si hago una pregunta, ¿Swami responderá de esa manera, la manera en la que me respondió antes? ¿De qué manera Swami probará que Él está aquí? ¿De qué manera voy a aceptar que este es mi propio Swami, el que me amaba y me cuidaba?” Y muchas otras preguntas que son naturales y que entiendo completamente y empatizo con la situación en la que se encuentran.
Me sentía muy incómodo y estábamos yendo a la casa de estos devotos a quienes nunca había visto antes. Ni siquiera sabía que existían hasta que Swami se invitó a Sí mismo a su hogar. Así que allí estábamos, finalmente, y ellos también estaban quietos, sin saber qué hacer. Cuando entramos, le dieron Arathi a Swami y de cualquier manera que pudieran expresar su felicidad y gratitud y darle la bienvenida a Swami, lo hicieron. ¡Todo esto en alguna parte en el medio de la noche!
Mientras tanto, yo estaba muy deseoso de que Swami entrara a la habitación y cerrara el capítulo rápidamente y que nos ocupáramos del resto a la mañana siguiente. Después de una breve charla, Swami ingresó a la habitación Maestra (principal) que fue reservada para Swami. Los devotos tuvieron la oportunidad de ofrecérsela a Swami para Su uso durante la estadía. Entonces, fui a la habitación de Swami y cerré la puerta. Estaba esperando que todos los devotos se dispersaran para poder ir a mi habitación al otro lado de la casa. Estaba un poco inquieto y nervioso y esto era visible en mi lenguaje corporal. Swami estaba sentado tranquilo en una esquina, en silencio en una silla. Me miró mientras yo me movía nerviosamente y me preguntó: “¿Qué te sucede? ¿Qué te sucedió?” Yo dije: “¡Swami! ¡Me siento muy incómodo!” Estas personas que no conozco. Nunca las he visto. Ellas no me conocen. Swami sonrió y dijo: “Oh, está bien. Yo los conozco a todos. Todos ellos me conocen. ¡Eso es suficiente para ti!” (Risas) No tienes que conocerlos y ellos no necesitan conocerte a ti necesariamente”.
Y Él me puso en mi lugar. Creo que yo estaba exagerando un poco. Él habló así para que pudiera relajarme y dejar que las cosas sucedieran como se suponía que tenían que suceder. Cuando las cosas se acomodaron, fui a mi habitación y, como estaba cansado del viaje, me dormí con velocidad.
A la mañana siguiente, fui a la habitación de Swami. Otra vez, la tensión comenzó. ¡Dios mío! Voy a tratar con estos devotos una vez más. Tengo que sentarme y hablar con ellos y ellos harán preguntas. Dios sabe lo que irán a preguntar y lo que Swami irá a responder. Porque, a veces Swami, siendo Swami, dirá cosas que tienen mucho sentido, y otras veces dirá cosas que no tendrán ningún sentido en ese momento. Probablemente, un mes o un año después, la gente se dará cuenta.
Por ejemplo, estábamos en Chennai, yendo a la casa de un devoto en particular y cuando Swami entró, vio a un joven músico en ciernes (Stephen Devassy), pianista y un genio musical de su propia especie, muy famoso en el mundo musical del sur. Swami lo miró y dijo: “Oh, ¿tu pierna está bien? ¿No
has tenido un accidente?” Él estaba confundido. Dijo: “Mi pierna está bien”. Luego, Swami le preguntó: “Estabas yendo a Goa y tuviste un accidente. ¿No es así? Tu pierna se lastimó”. Pero el nuevo y desconcertado devoto dijo: “¡Nunca he estado en Goa ni he tenido un accidente y mi pierna nunca se lastimó!” Él estaba totalmente confundido y la gente alrededor creyó que las cosas no iban color de rosa. Swami estaba diciendo algo que no tenía ningún sentido. De todas maneras, Swami entró a la casa y eventualmente los bhajans y otros programas pasaron y fue momento de partir. Otra vez, Swami miró a esta persona y dijo: “Oh, ¿entonces, tu pierna está bien?” Ahora, esta persona quizás empezó a pensar si era algo que se habría olvidado. Pasaron unos días y luego de dos semanas, recibí una llamada. Me dijeron que esta persona en particular estaba camino a Goa cuando un accidente ocurrió. Esta persona, su hermano y un par de otras personas estaban viajando a Goa y tuvieron un accidente. Y en el accidente, su hermano, a quien él considera más querido que él mismo, se fracturó la pierna. Entonces este muchacho se dio cuenta de la pista que Swami le había dado antes. Con el tiempo, vino aquí y estaba profundamente agradecido con Swami. Ahora él era consciente de que Swami definitivamente sabía que ellos iban a tener un accidente camino a Goa. Y definitivamente, Swami lo salvó a él y a su hermano, a quien quería tanto, que se debe haber apoderado de su karma de fractura de pierna. Esta fue una situación en la que Swami dijo algo que no tenía ningún sentido en ese momento, sino mucho después.
Volviendo a la historia original. Así que aquí, estábamos en la mañana y yo no estaba seguro sobre cómo Swami iba a hablar. Cuando salía de la habitación de Swami, sentí que el aire estaba tenso en la habitación. Todo el mundo estaba intentando evaluar lo que estaba ocurriendo. Y entré caminando a esta habitación con aire tenso detrás de Swami, en medio de tanto estrés y me senté en mi silla al lado de la de Él. Pero luego, de repente, perdí completamente el sentido de mí mismo. Swami comenzó a hablar y a seleccionar personas. “Conozco a tu padre, hizo esto y aquello”. Swami siguió hablando, y por cerca de dos horas, los entabló en una conversación. Imaginen un grupo de personas a quienes yo no conocía en absoluto; ni siquiera sus nombres y profesiones, ni cuál era su relación con Swami en el pasado, y aquí estaba Swami, quien siguió sin parar durante dos horas, Sus palabras fluían continuamente. ¡En dos horas, Él mira y conquista! Todo el mundo estaba conquistado. El corazón de todos estaba tan lleno de amor y emoción. Y luego, Él regresó de la habitación y me dijo: “Simplemente, te estabas estresando. ¿No te dije que Yo los conozco a todos y que todos ellos me conocen a Mí?” Y yo dije: “¡Sí, Swami, ahora entiendo que conocías a todos!”
La razón por la que compartí este incidente es porque todos ustedes están aquí. Estoy seguro de que no conozco a cada uno de ustedes y que quizás no todos ustedes me conocen. Pero definitivamente, existe alguien que los conoce a ustedes tanto como me conoce a mí. Y eso es razón suficiente por la que debemos estar juntos. Estamos aquí por Swami. ¡Él nos conoce, Él nos quiere aquí, Él nos llamó aquí y por lo tanto, estamos aquí! De otra manera, ¿quién vendría por alguien más? Swami solía hacer una broma durante los primeros años. “Este Muddenahalli estuvo allí por muchos años, durante décadas estos edificios estuvieron allí, pero, ¿por qué no había tanta gente aquí?”, Él solía preguntar. Y obviamente, la respuesta es directa y simple. Porque Swami no estuvo aquí de esta manera como está aquí hoy. Estamos todos aquí porque Swami está aquí. Y Swami quiso que todos nosotros estuviéramos aquí. Porque Él nos conocía a todos y Él nos quiso a cada uno de nosotros. Y por eso, Él hizo todo lo necesario para reunirnos a todos.
— Sri Madhusudan Naidu en ‘Tattva Sameeksha’ (19 de marzo de 2018), Sathya Sai Grama, Muddenahalli
(‘Tattva Sameeksha’ es una sesión de Charlas los lunes por la tarde, a cargo de oradores eminentes para los residentes del Ashram de Sathya Sai Grama en Muddenahalli)
Descargar archivo: “Yo los conozco a todos. Todos ellos me conocen. ¡Eso es más que suficiente!” Tattva Sameeksha 19-03-18 PDF
Fuente: Sai Vrinda
Nota: Esta es una traducción provisoria realizada por devotos voluntarios, como servicio de difusión. Las traducciones oficiales son efectuadas a su debido tiempo por la editorial Premamruta Prakashana, de Muddenahalli.